martes, 18 de mayo de 2010

Mi palabra de hoy


Exclamación admonitoria o burlesca que se dirige a una persona que ha hecho o dicho algo que se considera extravagante, ridículo, erróneo o absurdo.
Ejemplo:
- Mi novio tiene cosas de peón caminero. El otro día estuvo tomando el sol durante más de cuatro horas sin protección y, consecuentemente, se quemó todo el cuerpo.
Los peones camineros eran las personas que se ocupaban del mantenimiento de los caminos públicos y las carreteras. Cada uno de ellos tenía asignado un tramo del camino que debía recorrer y controlar todos los días, por lo que solía vivir en sus inmediaciones, en pequeñas casetas. Era, por tanto, una labor solitaria y sacrificada, con lo que se les solía achacar que la soledad terminaba afectando a su carácter, y volviéndolos raros, extravagantes e incluso, un poco locos. He ahí el origen de la expresión.
La profesión de peón caminero ha ido desapareciendo, por lo que la expresión también está en claro desuso, aunque todavía se utiliza.

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