Mi palabra de hoy

"La naranja mecánica"

Seguimos con historias del fútbol. Hoy que Holanda ha vapuleado a Italia, 3-0 en la Eurocopa, viene a bien recordar que el equipo holandés es conocido como la naranja mecánica. El apodo se le puso en el mundial de 1974, donde Holanda exhibió un fútbol que no se había visto hasta entonces: la exquisita calidad técnica de sus jugadores, su creatividad, su pasión por el buen fútbol y su permanente búsqueda del gol los hizo merecedores de lo que se denominaría como "fútbol total", una maquinaria perfectamente engrasada de 11 piezas vestidas de naranja (el color de su camiseta). De ahí el apelativo de "naranja mecánica", tomando prestado el título de la famosa película de Stanley Kubrick. En aquel mundial, capitaneaba el equipo uno de los mejores jugadores de todos los tiempos: Johan Cruyff. Ya por entonces jugaba en el Barça y maravillaba con sus dribblings y sus goles imposibles. Después, en los ´90, vendría su etapa como entrenador en dicho club, consiguiendo con el llamado "Dream Team" los mejores resultados que jamás ha cosechado el club azulgrana. Aclamado por unos y vilipendiado por otros, "el flaco" sigue siendo una de las personas más influyentes en el equipo culé hasta el punto de ser tachado como la persona que hace y deshace a la sombra de los presidentes.